He leído la última chirigotada de Elena Valenciano, la vocera o parlanchina “miembra” del PSOE, el partido de los obreros socia-listísimos, a cuenta de los actos de sabotaje y terrorismo que la UE de Merkel y EEUU están perpetrando en Ucrania. No contentos con AlQaeda en Siria (donde les están fallando más de la cuenta) han vuelto la mirada hacia Ucrania. Y han tratado de estafar nueva y masivamente a la opinión pública hablando falsariamente de “oposición democrática”  “violencia”, “torturas a los detenidos” e incluso, en el colmo de la desfachatez más deleznable hablar de “manifestantes pacíficos”. Tratar de desmontar las charlotadas pro-norteamericanas de la Valenciano y su partido, el Psoe-GAL, el otro mantenedor de la corrupción institucional, es ponértelo “a huevo”. La Valenciano urge a Ucrania (poniéndose al dictado del amo americano) a dialogar ”con la oposición democrática y con la sociedad civil para intentar acabar con «la alarmante escalada de violencia». Definitivamente deben de creer que todos somos una colección de imbéciles o catetos que no nos enteramos de lo que acontece en la arena internacional. A través de los medios que no están al servicio de las oligarquías financieras del PPsoe, se entiende.

Ucrania es un país formalmente democrático, es decir capitalista, pero no satisface los intereses de los mercaderes de Europa y EEUU porque no tiene ningún monigote suyo en el poder, no es un agente a tiempo completo del Nuevo orden mundial y el presidente del país es tirando a pro-ruso. A pesar de que los medios de producción están en manos de las multinacionales, Ucrania no quiere (al menos por ahora) recoger las migajas de un puñado de euros a cambio de una anexión a la OTAN y formar parte del entorno europeo occidental, algo que le es ajeno. Viktor Yanukovich –su actual presidente- tumbó en unas elecciones a la pájara corrupta Yulia Timoshenko, una marioneta que tenía a mano el Departamento de Estado norteamericano y el Banco Central Europeo para abrir en canal a Ucrania. La jugada les salió mal y ahora han optado por poner en marcha el injerencismo sin caretas y la desestabilización política, utilizando a terroristas en las calles.

A pesar de que Ucrania tiene formalmente todos los títulos de “democracia capitalista”, en el Oeste siguen hablando en términos de “oposición democrática”, como si el gobierno ucraniano no fuese “demócrata”… y eso que ganaron unas elecciones según los cánones de las democracias burguesas (Marx, dixit). Pero es que la bulimia expansionista USAmericana y la de sus mariachis europeos es incurable, por lo que están haciendo todo lo posible por deslegitimar a un gobierno legal. La oposición ucraniana es, básicamente, un conjunto de  desinformados (si supieran lo que les espera bajo los dictadores financieros) y gentuza extremista nacionalista que está utilizando la violencia terrorista bajo el patrocinio norteamericano y europeo. Si meten a Ucrania en la OTAN, Rusia estará a punto de caramelo y Lenin ya podría ir mudándose de la Plaza Roja…o eso creen.  Por eso les valen todo, desde neonazis nostálgicos de la Wehrmacht hasta esas FEMEN, montajistas de diseño hábilmente puestas en escena como bellezas eslavas, que se dedican a organizar saraos con aroma a feminismo postizo-histérico. Otra operación de “guerra psicológica” al estilo Farsange y Snowden. Dicen estas majaderas de FEMEN que estos días en Kiev huele a “revolución” y solicitan el auxilio de Obama y la UE para consolidar un nuevo Estado …de corte ¿femi-fascista?. Ah, ¿pero esta no era la progresía que lanzaba bragas rojas a Rouco? En fin…

Pero, a lo que vamos, para la Valenciano la violencia en Kiev no está siendo protagonizada por los manifestantes “opositores” sino por el Gobierno ucraniano, plasmada, según cuentan los mercachifles de RuGALcaba, en las torturas recibidas por opositores como Dymitro Bulatov. Seguramente, pero…¿Torturas? Habrá que recordar que este país es uno de los campeones de las torturas y malos tratos policiales, según constan en decenas de informes de la ONU que han sido enviados a la basura por los distintos gobiernos del PPSOE ¿Y tiene la desvergüenza esta sujeta de mirar en otro país y hablar de torturas? Verdaderamente repugnante.

Para salir al paso de la “violencia” ucraniana Valenciano ve como positivo que la UE soborne económicamente a Ucrania de cara a una futura “transición” (o transacción-estafa generalizada, como aquí sucedió con el contubernio del Psoe, el PCE carrillista y los neofranquistas). Sólo que la “transición” ucraniana estará vigilada (de nuevo como aquí) por la CIA y los terroristas financieros de Europa. La portavoz psoista se recrea en el tópicamente impreciso, vacuo, estomagante y vomitivo discurso del mediocre analista político: «continuar con las reformas necesarias para la consolidación democrática en Ucrania..» Yo tengo la fea costumbre de ver estas cosas al revés: realmente lo que desea Valenciano es que Ucrania sea pasto del saqueo, el expolio, la rapiña, la otanización y la falsa democracia de los oligarcas de Europa.

Ni una sóla mención de Valenciano a la brutal violencia desatada por la “oposición” ucraniana. Más al contrario, la estulticia de la vocera del Psoe se hace patente al hablar de que hay que «dar cauce a la voluntad y a la esperanza de quienes de forma pacífica reclaman que se escuche su voz». De forma pacífica…con dos cojones. Pacifismo en Ucrania, a día de hoy, sólo se ha visto el de la policía, intentando contemporizar hasta lo insoportable y salir al paso de la bien calculada violencia opositora. Vamos, parecido a como actúa la policía de Cifuentes o la de los matones catalanes al servicio de la Generalitat, quienes desatan violencia brutal e infiltrados policiales en las manifestaciones, éstas sí, pacíficas. Lo que ocurre es más simple que todo esto. Si los hechos violentos acaecidos en Kiev, por parte de los mal llamados “opositores” (“demócratas”, según la Valenciano), se hubieran dado en España o EEUU, las muertes de manifestantes, y heridos, se hubieran contabilizado por centenares, al menos en el país de Obama. Esto lo ha dicho el ex agente de la CIA y el FBI, Chuck Joyner. Pero vamos, no hace falta que lo diga este Joyner sino que es una conclusión a la que uno puede llegar con bastante lógica. Entonces ¿que diría la infecta vocera Valenciano y el PPSOE? Pues que se trataría de una respuesta proporcionada al vandalismo callejero.

Pero la perla final es la que sigue. Valenciano «pide que se investiguen las muertes y los casos de tortura que organismos internacionales y medios de comunicación han denunciado en las últimas semanas». Hay un grave problema aquí. El Relator contra la Tortura de la ONU (o quienes le precedieron) tiene en su poder infinidad de casos de tortura y muertes bajo custodia policial en el Estado español, pero a saco, vamos. Y si damos un paseo por Guantánamo, Irak, Libia, Afganistán…las atrocidades se suceden a diario, haciendo mutis por el foro toda esta gentuza que clama contra Ucrania. ¿Qué sucede pues? Que los que premian o indultan a torturadores, los que cobijan a asesinos terroristas como Emilio Hellín –asesor a tiempo completo de la guardia civil-, se atreven a ir a Ucrania a pedir el recibo de la luz a las autoridades ucranianas por supuestos casos de torturas a detenidos. Como si aquí no pasase nada o nunca hubiera pasado. Como si el reino de la pútrida España judicial, monárquica, política y policial…fuese el país más respetuoso del Sistema Solar con los derechos humanos. Si acaso, con los divinos o diabólicos.